De Andalucía al Charleston: la nueva era flamenca de Victorio & Lucchino en Simof Madrid

La pasarela madrileña se vistió de homenaje cuando la firma andaluza Victorio & Lucchino abrió la IV edición de SIMOF Madrid 2025 con su nueva propuesta, Flapper’s Dream. Un desfile que, además, sirvió de escenario para la entrega de los prestigiosos Premios Flamenco en la Piel. El escenario elegido —el hotel Wellington en el corazón de Madrid— cuando hasta 49 firmas de moda flamenca proyectan su visión contemporánea de la tradición.

Un equipo con raíces y personalidad

Desde su encuentro profesional en Sevilla a finales de los años ochenta, José Víctor Rodríguez Caro y José Luis Medina del Corral —los creadores detrás de Victorio & Lucchino— han construido una firma reconocida por su temperamento andaluz, su sensibilidad artesanal y su mirada internacional. Su filosofía se basa en “rescatar de nuestras raíces la artesanía de los bordados… llevándolos de un modo conceptual a un look de vanguardia”.

Desde sus inicios, han sabido conjugar lo regional —el alma de Andalucía— con los requerimientos de un mercado global, adaptando volúmenes, tejidos nobles y bordados detallados.

La paleta, los tejidos y la narrativa de ‘Flapper’s Dream’

En su colección para 2026, presentada en SIMOF Madrid 2025, Victorio & Lucchino se inspira en la figura de la “flapper” de los años 20: una mujer joven, moderna, liberada, símbolo de cambio y sofisticación ligera.
Los diseñadores rinden tributo a ese espíritu retomando volantes, puntillas y tejidos vaporosos que evocan movimiento y ligereza. Según los datos de presentación: “tejidos: gasa, terciopelo y encajes” y “colores: una paleta extensa que va desde tonos pasteles, pasando por verdes y terracotas, al morado, azul noche y dorados.”

Este uso del terciopelo y la gasa se alinea con su constante apuesta por telas nobles y acabados cuidados, que han caracterizado su trayectoria.
Por otro lado, la paleta mencionada para este desfile abarca un espectro amplio: desde el negro y blanco más clásicos hasta una riqueza de tonos como marrones, verdes, burdeos, púrpuras y mostazas. Esto refuerza un juego cromático que une tradición y audacia, tal como marca su sello.

Una reinterpretación contemporánea de la moda flamenca

Lo que hace especial este desfile es cómo Victorio & Lucchino logran que la estética flamenca —con sus volantes, sus raíces, su expresividad— dialogue con la estética de la flapper: armado de libertad, de ligereza, de movimiento. Los volantes que se agitan, los encajes que se deslizan, las telas que fluyen… todo al servicio de una mujer que celebra su feminidad y su autonomía.
En este contexto, la colección aporta una mirada fresca: no es folklore puro, pero tampoco desvinculado de sus raíces. En ese equilibrio reside su madurez: la tradición reinterpretada, actualizada y exportable.

Visión profesional, tono cercano

Desde la óptica de este redactor, con más de veinte años explorando tendencias de moda y alta costura, este desfile de Victorio & Lucchino reafirma su posición como interlocutores válidos de la moda flamenca contemporánea. Han logrado conjugar con éxito:

• La artesanía andaluza (bordados, volantes, encajes)

• Un vocabulario de tejido y movimiento (gasa, terciopelo)

• Una paleta cromática que se atreve y controla (pasteles → verdes → terracotas → morado → azul noche → dorados)

• Y, sobre todo, la adecuación al contexto: una mujer libre, una pasarela que mira hacia el futuro sin perder el pasado.

Si eres parte del universo flamenco —ya sea como creador, comprador o simplemente apasionado de la moda— observar este tipo de colecciones supone una lección sobre cómo actualizar la tradición sin renunciar a su esencia. Porque al final, el alma anda por la memoria, pero el cuerpo debe caminar hacia adelante.

fotografía: Gerardo Morillo - Simof Madrid

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